La polémica sobre la posible vuelta de Bertín Osborne a Canal Sur se ha intensificado tras la carta enviada por Inma Nieto, portavoz del grupo parlamentario Por Andalucía, al director general de la Radio Televisión de Andalucía (RTVA), Juan de Dios Mellado. En esta misiva, Nieto solicita que Osborne no regrese a la televisión pública debido a su reciente inclusión en la lista de morosos de la Agencia Tributaria.
¿Quién es Bertín Osborne?
Bertín Osborne, famoso presentador y cantante español, ha estado en el ojo del huracán tras conocerse que tiene una deuda con Hacienda de 865.000 euros. Esta cifra ha llevado a Nieto a comentar que ‘una persona que le debe más de 800.000 euros a la hacienda pública no es, desde luego, el perfil adecuado para estar en las pantallas de Canal Sur ni de ninguna televisión pública’.
La carta enviada a RTVA
En su carta, la portavoz de Por Andalucía no solo critica la situación fiscal de Osborne, sino que también lo califica de ‘tramposo fiscal’ y ‘defraudador’. Nieto entiende que su regreso a la pantalla de Canal Sur ‘sería perturbadora, ya que supondría blanquear el fraude’. A lo largo de los últimos cinco años, Osborne ha presentado el programa ‘El show de Bertín’ en Canal Sur TV.
Una posición firme por parte de Por Andalucía
Inma Nieto es clara en que es ‘inadmisible que un tramposo fiscal sea la cara de un programa en una televisión pública’. La portavoz indica que desde su grupo parlamentario es esencial ‘mantener los mínimos estándares éticos’ en los medios de comunicación públicos.
¿Qué sucederá con la programación de Canal Sur?
Con la polémica generada y las críticas hacia Bertín Osborne, queda pendiente la decisión del director de la RTVA respecto a su regreso a la programación. ¿Tomará medidas en respuesta a la solicitud de Por Andalucía?
Conclusión
La situación de Bertín Osborne plantea preguntas importantes sobre la ética en la televisión pública y cómo debe actuar ante tales situaciones. Las cartas de representantes políticos a los medios de comunicación son un recordatorio de que la responsabilidad pública también implica responsabilidad fiscal.
¿Deberían los medios de comunicación mantener un estándar más alto para aquellos que aparecen en su programación?