La Foca que Sorprendió a Científicos
Ronan, la foca californiana de 15 años, ha estado cautivando a científicos y amantes de la música por su sorprendente habilidad para mantenerse al ritmo de diversas melodías. Desde el disco hasta el rock, su talento brilla especialmente con los clásicos como ‘Boogie Wonderland’.
Un Estudio Revelador
En un reciente estudio realizado por investigadores en la Universidad de California, los científicos decidieron volver a evaluar las habilidades rítmicas de Ronan. «Ella simplemente lo clava», comentó Peter Cook, un neurocientífico que ha estudiado a Ronan durante una década.
No es común que los animales, además de los humanos y algunos primates, puedan reconocer y moverse al ritmo de la música. Sin embargo, Ronan ha demostrado que es una excepción a esta regla, desafiando la concepción tradicional sobre la musicalidad en el reino animal.
La Evolución de sus Habilidades
En el pasado, los científicos pensaban que solo los animales que eran aprendices vocales, como los humanos y los loro, podían aprender a seguir un ritmo. Hugo Merchant, un investigador del Instituto de Neurobiología de México, comentó: «La capacidad de Ronan para aprender a bailar al ritmo sin necesariamente cantar o comunicarse musicalmente es excepcional».
Resultados del Nuevo Estudio
Los recientes experimentos, publicados en la revista Scientific Reports, mostraron que Ronan sigue siendo uno de los mejores intérpretes. Durante las pruebas, los científicos eligieron tres diferentes ritmos y grabaron a la foca moviendo su cabeza al compás.
En comparación con 10 estudiantes universitarios, Ronan destacó como la mejor, mostrando que su habilidad musical no solo perdura, sino que ha mejorado con el tiempo. Cook añadió: «Ningún humano fue mejor que Ronan en todas las formas en que probamos la calidad de mantener el ritmo».
El Futuro de Ronan y sus Compañeros
Además de Ronan, los investigadores planean entrenar y evaluar a otras focas. Si bien se sospecha que otras focas también pueden moverse al ritmo, se espera que Ronan siga siendo la estrella indiscutible.
Este estudio refuerza el lugar de Ronan como una de las «embajadoras principales» de la musicalidad animal, sugiriendo que la interacción entre la música y las especies no humanas todavía tiene mucho por explorar.
