Laia Aleixandri enfrentó al Barcelona —un club donde pasó cinco años formativos como futbolista— en un partido decisivo del Grupo D de la UEFA Women’s Champions League. Esta vez, llevó el brazalete de capitana para Manchester City, liderando a su equipo con determinación.
El encuentro permitió que los aficionados y excompañeros de Barcelona apreciaran el progreso de Aleixandri a medida que su contrato en Inglaterra se acerca a su fin.
Gran partido contra un viejo amigo
La primera oportunidad de Barcelona llegó cuando Aitana Bonmatí recuperó la posesión, iniciando un ataque que obligó a Khiara Keating a realizar una impresionante parada. Keating desvió el tiro de Salma Paralluelo para un córner. Defender a una ganadora del Balón de Oro como Bonmatí no es una tarea fácil. Sin embargo, Aleixandri conocía bien sus fortalezas desde sus días en el fútbol juvenil.
“Fue espectacular —una jugadora increíble. Creo que ha sido la mejor jugadora de City hoy, junto con la portera”, dijo Bonmatí sobre su excompañera.
Aleixandri tiene una larga historia con el Barcelona. Desde 2013 hasta 2017, jugó junto a nombres familiares como Gemma Font y Ona Batlle. Progresó a través de la academia juvenil antes de mudarse a Atlético de Madrid en busca de más oportunidades.
Liderazgo y versatilidad de Aleixandri
En este partido, Aleixandri lideró la defensa de Man City junto a Alanna Kennedy, Kerstin Casparij y Leila Ouahabi. Dirigió su línea de fondo con autoridad, gritando instrucciones, gesticulando a sus compañeras e incluso dialogando con la árbitra serbia Jelena Cvetković cuando amonestó a City por pérdida de tiempo. Su liderazgo en el campo fue evidente.
La versatilidad de Aleixandri brilló cuando se incorporó al mediocampo para entregar un pase preciso a Jill Roord, cuyo tiro golpeó el travesaño. A pesar de dejar momentáneamente su posición defensiva, Aleixandri regresó de inmediato para solidificar la línea trasera, lo que demuestra su inquebrantable compromiso.
Desde que se unió al Manchester City, Aleixandri ha crecido significativamente bajo la dirección de Gareth Taylor. Se ha adaptado a las exigencias físicas del juego inglés, volviéndose más fuerte y resistente.
El gol de Bonmatí finalmente selló la victoria de Barcelona después de ganar una carrera y un duelo contra Leila Ouahabi. Bonmatí anotó el segundo gol después de que Pajor superó a Aleixandri para entregar una asistencia perfecta. Sin embargo, sus contribuciones a lo largo del partido subrayaron su crecimiento e importancia para el Manchester City.
Un florecimiento en Manchester
El desarrollo de Aleixandri como jugadora refleja su adaptabilidad y determinación. Tras dejar Barcelona debido a las limitadas oportunidades en una plantilla defensiva abarrotada, su tiempo en el Atlético de Madrid la preparó para el siguiente paso.
En el Manchester City, se ha convertido en una jugadora clave, adoptando un estilo de juego que combina la técnica española con las demandas físicas del fútbol inglés.
“Sus habilidades con el balón son increíbles; sabe exactamente cuándo salir y cuándo no, cuándo avanzar y cuándo mantener su posición. Defensivamente, es muy agresiva y lee el juego muy bien. Para mí, es una defensa central muy completa”, elogió Bonmatí.
La evolución de Aleixandri de una joven promesa a líder en uno de los mejores clubes de Europa es una historia de resistencia, adaptabilidad y habilidad excepcional. Su futuro aún es incierto, pero es un hecho que su contrato expira en verano de 2025. Manchester City desea retenerla, pero el Barcelona también quiere que regrese a casa. Muchos otros equipos también están interesados en sus servicios.
