En las últimas horas, la influencer María Pombo se ha convertido en el centro de atención mediática, no por sus éxitos en el mundo de la moda, sino por la creciente preocupación en torno a su marca Tipi Tent. Esta empresa, fundada en 2017 junto a su hermana Marta y el exmarido de esta última, Luis Giménez, enfrenta una deuda significativa de aproximadamente 17.504,86 euros.

Según informa la revista Semana, la situación se complica al mencionar que la empresa logística que ha trabajado con Tipi Tent no ha podido cobrar por los servicios prestados. A pesar de reiterados intentos de comunicación, la empresa, Logfret, asegura que es ‘imposible hablar’ con las responsables, quienes parecen haber desaparecido del radar.

«Ya nadie coge el teléfono», afirman desde Logfret, que describe su larga fila de reclamaciones. Desde noviembre de 2023, han intentado contactarlos para recibir el pago de siete facturas, vinculadas a la importación de ropa desde China.»

La sombra de una crisis financiera

Tipi Tent ha tenido que cerrar su tienda física en Madrid y actualmente solo opera en línea. A pesar de esta situación, las ventas de la marca parecen seguir sin inconvenientes, lo cual genera aún más incertidumbre sobre la solvencia de la empresa.

Desde Logfret se destaca que, «como empresa de logística con más de 50 años en el mercado, hemos realizado nuestro trabajo entregando la mercancía conforme al acuerdo y ahora nos sentimos engañados. Presentamos nuestras quejas al administrador único, Luis Giménez, pero la falta de respuesta nos ha llevado a consultar con nuestros abogados.»

Un cambio de rumbo para las Pombo

Con el creciente escándalo sobre la deuda de Tipi Tent, se ha revelado que las hermanas Pombo están considerando desvincularse del sector de la moda. Fuentes indican que María Pombo ha estado valorando salir de Name the Brand y centrarse en nuevas avenidas empresariales, como su papel de socia en Vertical Content Creator y su proyecto de cocina La Martinuca.

Las repercusiones de esta crisis dentro de Tipi Tent aún están por verse, pero los llamados a la responsabilidad financiera y la urgencia en el pago por parte de Logfret parecen marcar el comienzo de un capítulo complicado para la influencer y su marca.