En un emocionante encuentro en el estadio Santa María de Lezama, el equipo B del FC Barcelona, el Barça Atlètic, terminó empatando 2-2 con el Bilbao Athletic el 21 de marzo de 2025. Este partido se convirtió en una historia de oportunidades perdidas para el equipo dirigido por Sergi Milà, que jugó con un hombre de más durante más de una hora debido a una controvertida tarjeta roja.

El Bilbao Athletic abrió el marcador en el minuto 17, cuando Ibai Sanz remató de cabeza un centro bien colocado, dándole al equipo local una ventaja de 1-0. Su gol fue el resultado de una presión sostenida del equipo local, que logró dominar las interacciones iniciales.

Sin embargo, la dinámica del juego cambió drásticamente poco después, cuando, en el minuto 24, Aimar Duñabeitia recibió una tarjeta roja al derribar a Iván Cédric, el último hombre, cuando se encaminaba hacia el gol. Esta crucial decisión del árbitro dejó al Bilbao Athletic jugando con diez jugadores durante la mayor parte del partido.

A pesar de estar en desventaja, el Bilbao Athletic respondió con resiliencia. El Barça Atlètic logró empatar en el minuto 34, cuando Rubén López anotó con un brillante disparo que dio en el poste antes de entrar, igualando el marcador 1-1 justo antes del medio tiempo.

La segunda mitad comenzó con un revés para el equipo visitante, ya que Peio Canales restableció la ventaja para el Bilbao Athletic en el minuto 52, capitalizando un momento de confusión en la defensa, que algunos observadores afirmaron que involucraba una situación de fuera de juego que los árbitros no vieron. Este gol polémico llevó el marcador a 2-1 a favor del Bilbao.

El Barça Atlètic, luchando por puntos cruciales en su pelea contra el descenso, no se desanimó. Iván Cédric igualó el partido nuevamente en el minuto 65, robando el balón en la mitad del campo del Bilbao y finalizando hábilmente ante el portero Santos. Este gol marcó el cuarto de Cédric en la temporada, mostrando su creciente influencia en el equipo.

Con el marcador empatado de nuevo, el Barça Atlètic se lanzó al ataque en busca del gol de la victoria, pero a pesar de varias oportunidades, incluyendo un posible gol decisivo de Guillermo que salió mal, no pudieron aprovechar su ventaja numérica. El equipo creó numerosas oportunidades de gol, pero muchas se fueron desperdiciadas, reflejando un patrón de oportunidades perdidas que ha marcado su temporada.

El entrenador Milà expresó su decepción tras el partido, señalando, ‘Un punto se siente como una oportunidad perdida para nosotros hoy’. En el vestuario del Barça Atlètic, la sensación era de frustración, ya que aspiraban a una victoria muy necesaria que sigue siendo esquiva.

En la actualidad, el empate significa que el Barça Atlètic ha empatado quince veces esta temporada, una estadística preocupante mientras luchan por evitar el descenso de la Primera RFEF. Se encuentran en penúltimo lugar en la liga, a siete puntos de la seguridad, con su próximo partido contra los líderes Cultural Leonesa a la vista.

El encuentro contra el Bilbao Athletic no solo fue una prueba de habilidad, sino también de resistencia mental. Los jóvenes culés, aunque mostraron destellos de brillantez, tuvieron problemas bajo presión, lo que indica un equipo que busca claridad y confianza. Mientras el partido reveló su resiliencia, también destacó los desafíos en curso, particularmente su incapacidad para asegurar victorias cruciales cuando surge la oportunidad.

De cara al futuro, el Barça Atlètic deberá reevaluar sus estrategias y encontrar una manera de convertir estos empates en victorias si quieren tener alguna oportunidad en las últimas semanas de la temporada. Las apuestas están aumentando gradualmente y este equipo que no ha rendido debe encontrar la forma que les ha eludido durante toda la campaña.

La continua saga de su temporada enfatiza la necesidad de un enfoque renovado y una precisión táctica. La presión se mantiene alta, ya que cada partido se convierte en vital en esta lucha contra un posible descenso.