
El incendio provocado este lunes por el impacto entre un buque carguero y otro petrolero en el Mar del Norte, frente a las costas de Inglaterra, no cesa y continúa durante la mañana de este martes. Las autoridades temen a que este incidente produzca graves desastres ecológicos.
«El incendio duró toda la noche y todavía continúa el martes por la mañana», declaró Martyn Boyers, director del puerto de Grimsby, un sitio cercano al lugar del siniestro en el que uno de los tripulantes del carguero desapareció.

El petrolero «Stena Immaculate», fletado por el Ejército estadounidense, estaba anclado a unos 16 kilómetros de la ciudad de Hull, en Yorkshire, en la costa este de Reino Unido, cuando fue embestido por el buque portacontenedores «Solong», en circunstancias que aún se desconocen.
El carguero, con bandera portuguesa, transportaba una cantidad indeterminada de alcohol y quince contenedores de cianuro de sodio, un gas inflamable y con un grado elevado de toxicidad.
La colisión provocó un gran incendio y uno de los tanques del «Stena Immaculate», que contenía queroseno, se rompió, lo que generó una fuga y desató el temor por los importantes daños al medioambiente.
En tanto, la búsqueda de un miembro de la tripulación del carguero desaparecido del buque de carga fue suspendida durante la noche y está por confirmar si se reanudaría. El desaparecido es uno de los catorce miembros de la tripulación del carguero.
Según un portavoz de Downing Street, la situación medioambiental es «extremadamente preocupante» y los guardacostas elaboraron una evaluación para decidir las medidas contra la contaminación probablemente necesarias.
